Con varias alusiones a las luchas emprendidas, los objetivos alcanzados y los desafíos que aguardan en el futuro inmediato, se desarrolló hoy el Acto por el Día del Coraje Cívico en el recinto de sesiones del Honorable Concejo Deliberante de General Pueyrredon, que recuerda el inicio de las marchas de las Madres de Plaza de Mayo, ocurrido el 30 de abril de 1977.
Presidido por el Presidente del Cuerpo Deliberativo, Ariel Ciano, también estuvieron presentes los concejales Vilma Baragiola (UCR) y Verónica Beresiarte y Fernando Maraude (FpV), así como también el secretario de Gobierno, Marcelo Artime, y la directora general de Equidad y Calidad Educativa, Laura Spina.
A 35 años del primer encuentro de las Madres en torno a la histórica Pirámide de la Plaza de Mayo, representantes de organismos de Estado, de agrupaciones de Derechos Humanos e invitados especiales acudieron al recinto de sesiones para, en primer término, observar el video “Madres de Plaza de Mayo: La identidad no se impone”, documental realizado por el personal del Teatro Auditórium-Centro Provincial de las Artes”.
Luego fue el turno de escuchar al Presidente del Cuerpo, Ariel Ciano, mencionar que “en el momento más oscuro de la historia argentina, durante la dictadura cívico-militar, ellas (las Madres) alzaron su voz, soportando las burlas, la indiferencia y las afrentas de muchos compatriotas. Sufrieron la prisión, el exilio, las torturas, la desaparición. Fueron, como ellas mismas dijeron, mujeres comunes que vivieron experiencias extraordinarias con gran valentía”. Agregó “Hoy es diferente. Hay un Estado que las escucha y las cobija por una decisión política surgida hace alrededor de 9 años, que apoya la justicia que busca sanciones para quienes cometieron delitos de Lesa Humanidad”.
Para Ciano, algunos de los valores a rescatar de las Madres son la “constancia y dignidad que tuvieron para esperar ser escuchadas y el anhelo de buscar justicia y no venganza. Nos llena de orgullo –resaltó- estar cerca de ellas y nos genera un gran compromiso trabajar en conjunto por un país más justo con igualdad de oportunidades para todos”.
Asimismo, recordó que “hoy se celebra por primera vez esta fecha con el mural de desaparecidos en el recinto de sesiones, “una iniciativa del anterior presidente del Cuerpo Deliberativo, Marcelo Artime”. Y finalizó manifestando sus felicitaciones a Madres de Plaza de Mayo “por la huella indeleble que están dejando con sus acciones y pedirles disculpas si alguna vez se sintieron solas. Tengan certeza que hoy la gran mayoría de los argentinos está con ustedes”.
Por su parte, Artime recordó la política de Derechos Humanos implementada por la actual gestión del Gobierno Nacional desde que en 2003 se hizo cargo del Ejecutivo el fallecido primer mandatario Néstor Kirchner. “En alguna época parecía que no servía tener memoria, parecía que no habíamos aprendido del pasado. Pero al llevar adelante cuestiones que tienen que ver con el coraje, el Gobierno generó memoria y satisfacción de ver realizados muchos de los ideales de una generación. Hoy se vive otro clima”.
Tras ser leído un texto en homenaje a las Madres de Plaza de Mayo, una de las integrantes de la Línea Fundadora, María Juana Rivas, evocó el contexto en el cual se realizó la primera marcha. “No fue una protesta; fue un acto revolucionario”, evaluó. “Recuerdo el momento como una experiencia donde sufrimos burlas y mentiras en la búsqueda de nuestros hijos. Por eso, Azucena Villaflor reunió un grupo pequeño de Madres. Ya en la plaza, un policía nos instó a movernos de allí ante la prohibición de hacer reuniones de más de 3 personas. Nos dijo`circulen, circulen´. Entonces empezamos a caminar y surgieron las marchas”:
Con el tiempo y el paso de los meses, se sumaron las desapariciones y asesinatos. Entonces, fue aumentando el grupo de Madres en lucha. “El estupor y el horror no las paralizó –aseguró Rivas-; por el contrario, les dio más fuerza. Tuvieron coraje y siguieron adelante. Y llegamos al 2003, cuando una decisión política de Néstor Kirchner derogó las leyes que permitieron la realización de los juicios contra los genocidas. Nosotras siempre hemos estado caminando tras la luminosa memoria de nuestros hijos, siguiendo su trayectoria, que cada vez comprendemos mejor. Ellos están vivos en nuestra memoria, mientras vemos cómo se hacen realidad sus sueños de patria grande y soberana”.